CAZADORA DE MIEDOS

Tengo 28 años y me siento muy sola en mi habitación con el último paco por armar, ya van como 120 durante toda la noche y mi cuerpo pide más,  me es imposible dejar de armarlos y consumirlos, prender el próximo genera en mí mucha ansias, así como cuando deseas algo especial. Al costado mío también está las dos botellas de chata de ron que suelo tomar cuando estoy en consumo.  Mi cuerpo no se siente bien, estoy al borde del colapso, sumergida entre dolores de cabeza que no me dejan, siento que la cabeza me pesa mil kilos, no la soporto, todo mi cuerpo está débil y me tiembla, por momentos pierdo el conocimiento, pero al despertar encuentro el paco por armar en mi mano, y las botellas de ron a medio consumir. Sola, así me siento y así estoy, sin nadie a mi lado. De pronto, un gran miedo ingresa en mí, un temor que no quiero que regrese pero regresa cada vez que estoy con la pasta encima, esta maldita droga es una cochinada, no sé por qué lo hago, no lo sé, si me hace sentir tan mal.