1. Mantener la calma ante la situación, para poder actuar de manera precisa, si es posible buscar apoyo en otra persona de preferencia familiar o amigo de confianza.
2. No desechar los indicios de consumo (Ej. Envolturas, colirio, residuos de drogas, palitos partidos o cualquier objeto que haga sospechar consumo) para futuros análisis y pruebas de consumo.
3. Evitar gritar, desesperarse, etiquetar (Ej. Decirle drogadicto, Fumón, o insultar, etc.), no violentarse, no hacer del tema de consumo una situación sin salida, lo que provocaría resistencia y conducta agresiva en el consumidor.
4. Informarse con un especialista en el tema de adicciones que le pueda brindar las pautas iniciales.
5. Hacer frente a la situación, esto es, conversar con la persona que esta consumiendo de manera directiva (Ej. desde cuando consumes, porque lo haces, que drogas consumes, etc). aplicando las pautas ofrecidas por el especialista y el sentido común.
6. Asistir a sesiones de consejería con un especialista en adicciones que permita afrontar la situación y cerciorarse de la abstinencia. Esto es en el caso que el consumidor no desea asistir a las sesiones las pautas se dan a través de la familia.
7. Es indispensable el uso de análisis toxicológicos (Análisis de orina para detectar consumo de drogas) periódicamente para controlar que no haya consumo.
8. Si el especialista o consejero en adicciones sugiriese el tratamiento del caso, acudir a corto plazo a la institución recomendada, ya que la frecuencia de consumo tiene a agravarse y repercute en estabilidad personal familiar del adicto.
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