INTENTANDO SER UNA PRINCESA


Ya casi es de noche. Entro a mi habitación. Esta vez no prendo las luces y camino muy despacio hacia mi gran espejo. Me detengo frente a él y lo miro fijamente, como siempre lo he hecho, levantando mi rostro y sonriendo, pero ahora mi mirada es distinta: ya no luce como antes, ya no parece tan vacía. Retrocedo algunos pasos y me acuesto en mi cama empezando a recordar.

Todo empezó aproximadamente hace 2 años. Era un día de verano y faltaban pocos días para volver a estudiar después de las vacaciones. 

Todo era estupendo. Vería más seguido a mis amigas y saldríamos a conversar sobre todo lo que habíamos hecho en este tiempo.Yo había notado que había subido un poco de peso en las vacaciones, pero era algo a lo que no le daba importancia hasta ese entonces. Pero un día, cuando salí con mis amigas a pasear, entramos a una tienda de ropa y comenzamos a ver lo nuevo que había en ella. 

PARA PADRES: ¿DROGAS EN CASA?


Como todos los fines de semana, Javier fue a visitar a su hijo Diego de 17 años. Mientras esperaba que su hijo retorne de visitar a un amigo, empezó a recorrer la casa que compartió tantos años con su familia. La culpa y nostalgia de la separación invadían sus recuerdos. 

Cómo olvidar la infancia de Diego y el tiempo que compartía en sus juegos y rabietas infantiles. De pronto ingresó a su habitación, abrió las ventanas, ordenó la ropa del piso y tendió la cama. Al sacudir las sábanas residuos de hierba cayeron al suelo. La intriga y la preocupación lo llevaron a revisar toda la habitación. 

En los bolsillos de una casaca encontró pastillas de diversos colores con figuras grabadas. Refundido entre los zapatos halló dinero, documentos que no le pertenecían y un par de relojes. ¡Dios mío! ¿En que se ha metido mi hijo?, exclamó.

POKEMON GO


Para Jesús, joven profesional de 26 años, el juego es revolucionario y explica que una nueva era de gamers ha nacido. Para el “Gran Goyo” de 30 años es pura adrenalina, simplemente bacán desde el primer día en que obtuvo la aplicación. 

No paró en su búsqueda de pokemon y en poder compartir con su grupo de amigos la variedad de personajes que alguna vez veía en la serie.

 Este juego más que hacerles ganar dinero o algún objeto de valor demuestra que  es cuestión de “status”, es decir, a más personajes “una mayor sensación de satisfacción se siente”, algo así como “simplemente soy el mejor”.

CUANDO SE ASOMA LA TRISTEZA

A veces pienso que muchas personas, así como yo, viven deprimidas. No sé cómo entender esto y, justamente, eso es lo que me hace suponer que vivo deprimido. No siento nada. No me puedo sentir. No puedo expresar lo que siento porque no organizo lo que pienso y quiero expresar. Antes sí. Antes tuve vida, tuve fuerza. 

En realidad siento que está ahí, siento que está tapada, influenciada por mi sentimiento de frustración, por mi pesar, por la tristeza que alberga mi vida, por las consecuencias de mis actos, mis pensamientos negativos, destructivos y catastróficos; mi falta de fe y esperanza, mi visión floja y temerosa del mundo, mi sentimiento de inferioridad, de vulnerabilidad, mi aspecto físico y mis pocas ganas de luchar.